Mujer
Si alguien quisiese hacer algún día una sitcom sobre mí, después de observarme durante un fin de semana sola en casa, acabaría por opción 1, venir a darme un abrazo, opción 2, enviarme el número de un psicólogo. Y en cualquier escenario me pillaría bebiendo café del tiempo , viendo estúpidas series de crímenes en Netflix y con el maquillaje de la noche anterior. Ah, y quejándome, siempre. Pero es que llevamos unos días (meses, años) en los que, como sociedad, estamos fracasando. Y mira que no me apetecía seguir escribiendo porque para vomitar ya tengo el baño, pero estos días nos hemos lucido. Empezamos por violencia de género. Hace dos semanas me visitó una amiga. Una amiga muy inteligente y dedicada a la que siempre he admirado, sin embargo durante la cena el segundo día me preguntó por mi nuevo tatuaje (que es el símbolo de venus), y le dije que era por el feminismo. Me dijo que si fuese de verdad (me encantan las lecciones de feminismo) feminista me tatuaría también el símbolo